miércoles, 24 de octubre de 2012

Alexander Fleming



Fue un científico escocés famoso por descubrir la enzima antimicrobiana llamada lisozima. También fue el primero en observar los efectos antibiótico de la penicilina obtenido a partir del hongo Penicillium chrysogenum.

Fleming nació en Ayrshire, Escocia y murió en Londres, Inglaterra, a los 74 años. Trabajó como médico microbiólogo en el Hospital St. Mary de Londres hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial.

En este hospital trabajó en el Departamento de Inoculaciones, dedicado a la mejora y fabricación de vacunas y sueros. Almorth Edward Wright, secretario del Departamento, despertó el interés de Fleming por nuevos tratamientos para las infecciones.

Durante la guerra fue médico militar en los frentes de Francia y quedó impresionado por la gran mortalidad causada por las heridas de metralla infectadas (ej.: gangrena gaseosa) en los hospitales de campaña. Finalizada la guerra, regresó al Hospital St. Mary donde buscó intensamente un nuevo antiséptico que evitase la dura agonía provocada por las heridas infectadas.

Los dos descubrimientos de Fleming ocurrieron en los años veinte y aunque fueron accidentales demuestran la gran capacidad de observación e intuición de este médico escocés. Descubrió la lisozima durante sus investigaciones de un tratamiento a la gangrena gaseosa que diezmaba a los combatientes en las guerras; el descubrimiento ocurrió después de que mucosidades, procedentes de un estornudo, cayesen sobre una placa de Petri en la que crecía un cultivo bacteriano. Unos días más tarde notó que las bacterias habían sido destruidas en el lugar donde se había depositado el fluido nasal.

El laboratorio de Fleming estaba habitualmente desordenado, lo que resultó una ventaja para su siguiente descubrimiento. En septiembre de 1928 , estaba realizando varios experimentos en su laboratorio y el día 22, al inspeccionar sus cultivos antes de destruirlos notó que la colonia de un hongo había crecido espontáneamente, como un contaminante, en una de las placa de Petri sembradas. Fleming observó más tarde las placas y comprobó que las colonias bacterianas que se encontraban alrededor del hongo (más tarde identificado como Penicillium notatum) eran transparentes debido a una lisis bacteriana.

Para ser más exactos, Penicillium es un moho que produce una sustancia natural con efectos antibacterianos: la penicilina. La lisis significaba la muerte de las bacterias, y en su caso, la de las bacterias patógenas crecidas en la placa. Aunque él reconoció inmediatamente la trascendencia de este hallazgo sus colegas lo subestimaron. Fleming comunicó su descubrimiento sobre la penicilina en el British Journal of Experimental Pathology en 1929.

Fleming trabajó con el hongo durante un tiempo pero la obtención y purificación de la penicilina a partir de los cultivos de Penicillium notatum resultaron difíciles y más apropiados para los químicos. La comunidad científica creyó que la penicilina sólo sería útil para tratar infecciones banales y por ello no le prestó atención.

Sin embargo, el antibiótico despertó el interés de los investigadores estadounidenses durante la Segunda Guerra Mundial, quienes intentaban emular a la medicina militar alemana la cual disponía de las sulfamidas. Los químicos Ernst Boris Chain y Howard Walter Florey desarrollaron en Inglaterra un método de purificación de la penicilina que permitió su síntesis y distribución comercial para el resto de la población, sin embargo, este país tenía la totalidad de sus infraestructuras industriales dedicadas a las necesidades de la guerra. Por este motivo, ambos investigadores acudieron a Estados Unidos a poner en marcha plantas de producción dedicadas exclusivamente a la penicilina.

Fleming no patentó su descubrimiento creyendo que así sería más fácil la difusión de un antibiótico necesario para el tratamiento de las numerosas infecciones que azotaban a la población. Por sus descubrimientos, Fleming compartió el Premio Nobel de Medicina en 1945 junto a Ernst Boris Chain y Howard Walter Florey.

Estando de gira por España, en 1948, enferma su esposa del mal que truncaría su vida meses después. Con todo, continúa su trabajo en el Instituto del St. Mary (Saint Mary's College) que dirige desde 1946. Allí colabora una joven griega, la Dra. Voureka, por la que Fleming siente gran estima; cuando ésta regresa a su país, el Dr. Fleming, ya solo, se ve arrastrado por su recuerdo e irá por ella para hacerla su esposa en 1953. Poco disfrutaría de su recobrada felicidad conyugal.

Alexander Fleming murió en 1955 de un ataque cardíaco. Fue enterrado como héroe nacional en la cripta de la Catedral de San Pablo de Londres.

Fleming fue iniciado en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado en 1909, en la logia Nº 2682 Santa María de Londres, y fue exaltado al grado de maestro en la logia Misericordi, también de Londres, Nº3286.

Su descubrimiento de la penicilina significó un cambio drástico para la medicina moderna iniciando la llamada "Era de los antibióticos", otros investigadores posteriores aportaron nuevos antibióticos, como la estreptomicina utilizada para el tratamiento de la tuberculosis, salvando millones de vidas. El aporte científico de Fleming es doble pues además de descubrir una molécula química (penicilina) también encontró una molécula enzimática (lisozima) con actividad antibiótica. Las enzimas (ejem. lisozima) y los péptidos antibióticos son componentes naturales de la inmunidad innata de los animales que podrían ser utilizados con fines terapéuticos similares a la penicilina. Por esta razón Fleming puede ser considerado como el primero en descubrir una enzima antimicrobiana.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Profecías del fin del mundo que nunca se cumplieron


Siempre han existido, psíquicos, videntes o “iluminados” que creen saber la fecha exacta del fin del Mundo, pues bien, todo parece indicar que no han tenido mucha fortuna en sus aciertos todos han fallado.

¿Qué nos hace pensar que las profecías mayas que marcan como último día, el 21 de diciembre de 2012, finalmente sean acertadas? La lista muestra algunas de estas predicciones sobre el temido Apocalípsis ¿cuáles te parecen más asombrosas, extrañas o interesantes?

1. El efecto 2000 (2000)

Las fechas capicúas o redondas, han generado siempre un cierto encanto para fijar el momento final de la Humanidad. Sin duda alguna, tuvo muchos adeptos y seguidores en todo el mundo, el famosamente conocido efecto 2000, que como todos sabemos afectaría a todo el mundo tecnológico produciendo el fin de la civilización cibernética, devolviéndonos a la Edad Media. En fin, un trasfondo de realidad existía, pero no para generar la controversia a la que dio lugar.

2. Profecías mayas del final de los tiempos (2012)

La primera, de las siete profecías mayas, habla del final del miedo, dice: “que nuestro mundo de odio y materialismo terminará el 21 de diciembre y culminará el sábado 22 de diciembre del año 2012, (tiempo que ha venido acortándose por la misma aceleración del tiempo y esto da lugar a que dichos sucesos ocurran antes de esta fecha, unos 4 o 5 años antes) Para ese día la humanidad deberá escoger entre desaparecer como especie pensante que amenaza con destruir el planeta o evolucionar hacia la integración armónica con todo el universo, comprendiendo que todo está vivo y consciente, que somos parte de ese todo y que podemos existir en una nueva era de luz.

3. Caída de un meteorito (2000)

Según el famoso diseñador de moda, Paco Rabanne, y siguiendo según él, las profecías de Nostradamus, que había estudiado a conciencia, el fin del mundo llegaría en el año 2000; siendo una de las señales la destrucción de la ciudad de París al precipitarse un meteorito sobre ella.

4. Conjunción de ocho planetas (1962)

Al llegar el año 1962, la comunidad científica, entró de nuevo en controversia, sobre los posibles efectos de la conjunción de los ocho planetas del Sistema Solar al entrar en la Casa de Capricornio. Este evento tendría lugar el 2 de febrero de 1962 y produjo una cierta histeria colectiva, puesto que se pensaba que aquel hecho podría descompensar el equilibrio de fuerzas de atracción entre los distintos planetas.

5. Profecía numérica por la muerte de Cristo, que vivió 1598 semanas (1998)

1998 era el año señalado por muchos estudiosos en teología para que se desencadenase el fin del mundo, puesto que según sus cálculos, Jesucristo murió en la semana 1598 de su vida, y como nada pasó en 1598, la terminación 98 era la clave del fin total. Es paradójico que teólogos utilicen la figura de Cristo para vaticinar el fin de la Humanidad, explicándose claramente en la Biblia que vino al mundo y dio su vida para salvarla.

6. Perturbación magnética (1999)

El vidente Criswell, pronosticó que el fin del mundo llegaría en 1999, cuando una perturbación magnética acabaría con el oxígeno del planeta y le haría precipitarse hacia el Sol. Aún hay científicos curiosos que se dedican a estudiar como es posible que se genere ese tipo de efecto perturbador que pueda provocar semejante reacción. Y es que en esta vida es muy fácil para muchos demostrar teorías insólitas, aceptándose a ojos cerrados; mientras que los verdaderos científicos son cuestionados y reconocidos tan solo después de su muerte.

7. Explosión de bomba atómica (1960)

El 14 de junio de 1960, se produciría el advenimiento del fin del mundo, debido a una explosión fortuita de una bomba atómica, según pensaban los miembros de la secta llamada Comunidad de la Montaña Blanca.

8. Aviso divino a Viola Walker sobre el final de los tiempos (1975)

En las predicciones proféticas, es particularmente interesante estudiar la fuente primera emisora de dichas noticias. Pues bien, Dios en persona, fue quien avisó a la norteamericana Viola Walker, de que el fin del mundo ocurriría durante el mes de septiembre de 1975. Viola no fue para nada modesta a la hora de elegir confidente eligiendo ni más ni menos que al Altísimo.

9. Profecía televisiva (1967)

Anders Jensen, nacido en Dinamarca y líder de la secta Discípulos de Orthon, predijo públicamente en directo en un canal norteamericano de televisión, que el 2 de diciembre de 1967 llegaría el fin del mundo. Esto no ocurrió y no se le volvió a ver más en antena. Su estrellato fue efímero.

10. Papisa autoproclamada indica el fin del mundo (1969)

El 20 de febrero de 1969 fue la fecha seleccionada para el fin del mundo por una mujer que se autoproclamó Papisa, llamada María Straffler. En ese el día fatídico no ocurrió nada, así que decidió trasladar la fecha al 17 de marzo de ese mismo año; como podemos comprobar con idéntico resultado, para desgracia suya.

Día de la Madre

El Día de la Madre o Día de las Madres es una festividad que conmemora a las madres. Se celebra en diferentes fechas del año según el país, como se ve más abajo. El moderno Día de la Madre fue creado por Julia Ward Howe, en 1870, originalmente como un día de madres por la paz, que luego devino en un día para cada familia en honor a su madre y se ha convertido en una fiesta en muchos lugares del mundo.

Las primeras celebraciones del Día de la Madre se remontan a la antigua Grecia, donde se le rendían honores a Rea, la madre de los dioses Zeus, Poseidón y Hades.

Igualmente los romanos llamaron a esta celebración La Hilaria cuando la adquirieron de los griegos y se celebraba el 15 de marzo en el templo de Cibeles y durante tres días se hacían ofrecimientos.

Los primeros cristianos transformaron estas celebraciones en honor a la Virgen María, la madre de Jesús. En el santoral católico el 8 de diciembre se celebra la fiesta de la Inmaculada Concepción, fecha que se mantiene en la celebración del Día de la Madre en algunos países como Panamá.

En Inglaterra hacia el siglo XVII, tenía lugar un acontecimiento similar, también a la Virgen, que se denominaba Domingo de las Madres. Los niños concurrían a misa y regresaban a sus hogares con regalos para sus progenitoras.

En Estados Unidos, en cambio, la celebración tiene sus orígenes hacia 1870, cuando Julia Ward Howe, autora del Himno de batalla de la República, sugirió que esa fecha fuera dedicada a honrar la paz, y comenzó celebrando cada año encuentros en la ciudad de Boston, Massachusetts en celebración del Día de la Madre.

La estadounidense Ana Jarvis de Philadelphia, luego de la muerte de su madre en 1905, decide escribir, a maestros, religiosos, políticos, abogados y otras personalidades, para que la apoyen en su proyecto de celebrar el "Día de la Madre" en el aniversario de la muerte de su madre, el 2do domingo de mayo.

Tuvo muchas respuestas y para 1910 ya se celebraba en muchos estados de la Unión. Viendo la joven Jarvis, la gran acogida a su iniciativa, logró que el Congreso de los Estados Unidos presentara un proyecto de ley a favor de la celebración del Día de la Madre.

Finalmente, en 1914, el Congreso de Estados Unidos aprobó la fecha como el Día de la Madre y la declaró fiesta nacional, lo cual fue apoyado por el Presidente Woodrow Wilson. Más tarde otros países se adhirieron a esta iniciativa y pronto Ana pudo ver que más de 40 países del mundo celebraban el Día de la madre en fechas similares.

Sin embargo, la festividad impulsada por Ana Jarvis comenzó a mercantilizarse, de manera tal que se desvirtuaba el origen sentimental de la celebración. Esto motivó a que Ana presentara una demanda, en 1923, para que se eliminara la fecha del calendario de festividades oficiales.

Su reclamo, de gran alcance, provocó que fuera arrestada por disturbios durante una reunión de madres de soldados en lucha, que vendían claveles blancos, el símbolo que Jarvis había impulsado para identificar la fecha. Ana luchó con insistencia contra la idea que ella misma había impulsado, perdiendo todo el apoyo de aquellos que la acompañaron inicialmente.

martes, 16 de octubre de 2012

LAS 15 PROMESAS DE LA VIRGEN MARÍA

A quienes recen devotamente el Santo Rosario, la Virgen María promete cumplir lo que se conoce como las 15 promesas, dadas a conocer, a Santo Domingo y al beato Alano de Rupe durante una aparición mariana.

1. El que me sirva, rezando diariamente mi Rosario, recibirá cualquier gracia que me pida.
2. Prometo mi especialísima protección y grandes beneficios a los que devotamente recen mi Rosario.
3. El Rosario será un fortísimo escudo de defensa contra el infierno, destruirá los vicios, librará de los pecados y exterminará las herejías.
4. El Rosario hará germinar las virtudes y también hará que sus devotos obtengan la misericordia divina; sustituirá en el corazón de los hombres el amor del mundo al amor por Dios y los elevarán a desear las cosas celestiales y eternas. ¡Cuántas almas por este medio se santificarán!
5. El alma que se encomiende por el Rosario no perecerá.
6. El que con devoción rezare mi Rosario, considerando misterios, no se verá oprimido por la desgracia, ni morirá muerte desgraciada; se convertirá, si es pecador; perseverará en las gracias si es justo, y en todo caso será admitido a la vida eterna.
7. Los verdaderos devotos de mi Rosario no morirán sin auxilios de la Iglesia.
8. Quiero que todos los devotos de mi Rosario tengan en vida y en muerte la luz y la plenitud de la gracia, y sean partícipes de los méritos de los bienaventurados.
9. Libraré pronto del purgatorio a las almas devotas del Rosario.
10. Los hijos verdaderos de mi Rosario gozarán en el cielo una gloria singular.
11. Todo lo que se me pidiere por medio del Rosario se alcanzará prontamente.
12. Socorreré en todas sus necesidades a los que propaguen mi Rosario.
13. Todos los que recen el Rosario tendrán por hermanos en la vida y en la muerte a los bienaventurados del cielo.
14. Los que rezan mi Rosario son todos hijos míos muy amados y hermanos de mi Unigénito Jesús.
15. La devoción al Santo Rosario es una señal manifiesta de predestinación a la gloria.

BENDICIONES DEL ROSARIO

1. Los pecadores obtienen el perdón.
2. Las almas sedientas se sacian.
3. Los que están atados ven sus lazos desechos.
4. Los que lloran hallan alegría.
5. Los que son tentados hallan tranquilidad.
6. Los pobres son socorridos.
7. Los religiosos son reformados.
8. Los ignorantes son instruidos.
9. Los vivos triunfan sobre la vanidad.
10. Los muertos alcanzan la misericordia por vía de sufragios.

LOS BENEFICIOS DEL ROSARIO

1. Nos otorga gradualmente un conocimiento completo de Jesucristo.
2. Purifica nuestras almas, lavando nuestras culpas.
3. Nos da la victoria sobre nuestros enemigos.
4. Nos facilita practicar la virtud.
5. Nos enciende el amor a Nuestro Señor.
6. Nos enriquece con gracias y méritos.
7. Nos provee con lo necesario para pagar nuestras deudas a Dios y a nuestros familiares cercanos, y finalmente, se obtiene toda clase de gracia de nuestro Dios todopoderoso.