miércoles, 22 de septiembre de 2010

Cardenal John Henry Newman

La familia Newman se consideraba de origen holandés, y el propio apellido "Newmann" (con doble ene), en una generación anterior, podría sugerir un origen hebreo (judío), aunque NEWMANN es también una ortografía común entre calvinistas holandeses. Su madre, era de una familia de hugonotes, establecidos mucho tiempo atrás en Londres como grabadores y fabricantes de papel.

Newman se distinguió por su diligencia y buena conducta, como también evidenció cierta timidez y marginación, pues no tomaban parte en los juegos escolares. Él mismo dijo haber sido «muy supersticioso» en estos primeros años. Salvado de la experiencia de una escuela pública, que podía ser muy dura en esa época, disfrutó de la vida escolar. Aparte de sus estudios académicos (en los cuales sobresalió), actuó obras de teatro en latín, tocaba el violín, ganó premios de oratoria y editó publicaciones periódicas, en la cuales escribió artículos en el estilo de Addison.

Su infancia feliz llegó a un abrupto final en marzo de 1816, cuando se dio un colapso financiero sobrevenido por las guerras napoleónicas y el Banco de su padre se vio obligado a cerrar. Su padre intentó sin éxito la gestión de una fábrica de cerveza en Alton, Hampshire, y Newman se quedó en la escuela durante las vacaciones de verano a causa de la crisis familiar. El período comprendido entre principios de agosto, al 21 de diciembre de 1816, Newman siempre lo consideró como el punto de inflexión de su vida. Sólo en la escuela y conmocionado por el desastre familiar, cayó enfermo en agosto.

Más tarde llegó a ver esta época como una de las tres grandes enfermedades providenciales de su vida, ya que fue en el otoño de 1816 que tuvo una conversión religiosa bajo la influencia de uno de sus maestros, el Rev. Walter Mayers, quien recientemente se había convertido del calvinismo al evangelismo. Hasta este momento, Newman ha tenido una crianza convencional en un hogar fiel a la Iglesia de Inglaterra, donde se hizo hincapié en la Biblia en lugar de dogmas o sacramentos, y en donde alguna especie de "entusiasmo" evangélico habría sido mal vista. Su fe se identificó entonces como evangélica y calvinista y llegó a sostener que el Papa era el Anticristo.

En la fiesta de la Santísima Trinidad, el domingo, 13 de junio de 1824, Newman fue ordenado presbítero de la Iglesia de Inglaterra, y diez días después predicó su primer sermón en la Iglesia de Worton, Oxfordshire, durante una visita a su antiguo maestro, el reverendo Walter Mayers. Aquí, durante dos años, estuvo activamente comprometido con el trabajo parroquial. A finales de 1827, Newman sufre una especie de colapso nervioso provocado por el exceso de trabajo y por los problemas financieros de la familia, agregado a esto la repentina muerte de su hermana menor, Mary, a principios de 1828. Hubo también un factor teológico crucial: su fascinación desde 1816 con los Padres de la Iglesia, cuyas obras comenzó a leer sistemáticamente en el tiempo de vacaciones de 1828. Esto se considera como su segunda enfermedad providencial. Newman comienza a tener diferencias con el Movimiento de Oxford; este trataba de demostrar que la Iglesia de Inglaterra era la descendiente directa de la Iglesia de los Apóstoles, lo que luego los llevó a reconsiderar la relación de la Iglesia de Inglaterra con la Iglesia Católica Romana. Newman argumentaba que la doctrina de la Iglesia, definida en el Concilio de Trento era totalmente incompatible con los Treinta y nueve Artículos del siglo dieciséis de la Iglesia Anglicana.

En 1842 se retiró a Littlemore, y vivió bajo condiciones monásticas con un pequeño grupo de seguidores. Su vida fue de gran austeridad física, a la vez que de ansiedad. A sus discípulos les asignó la tarea de escribir sobre la vida de los santos ingleses, mientras que él escribía “Ensayos sobre el desarrollo de la doctrina cristiana”, y poco a poco fue reconciliándose con el credo y la liturgia de la Iglesia católica romana, gracias a sus estudios sobre la relación de la Iglesia de Inglaterra y la de Roma. En febrero de 1843 publicó un anuncio anónimo en el Diario Conservador de Oxford, una retractación formal de todas las afirmaciones que pronunciara contra Roma. En septiembre predicó su último sermón como anglicano, retirándose de Santa María, en Littlemore.

Dos años después de dejar Santa María, en 1845 se dio cuenta de que sus argumentos sobre la relación de la Iglesia Católica Romana con la de Inglaterra eran más fuertes de los que pensaban, y rindiéndose ante la autoridad de su propia argumentación, se convirtió al catolicismo. Fue recibido oficialmente en la Iglesia el 9 de octubre de 1845, y ordenado sacerdote el 1 de junio de 1847, en Roma. Celebró su primera Misa el 5 de junio de 1847. En 1851 Henry Edward Manning, otro importante miembro del Movimiento de Oxford siguió los pasos de conversión de Newman (también acabará siendo nombrado cardenal). En 1889, a los 88 años de edad, recibió del Papa León XIII la dignidad de cardenal, ingresando por tanto en el Colegio de Cardenales.

Su última Misa la celebró el 25 de diciembre de 1889. Falleció al año siguiente, el 11 de agosto de 1890. Su epitafio dice (Pasó de las sombras y las imágenes a la Verdad). En 1991 el cardenal Newman fue proclamado Venerable tras una minuciosa investigación de su vida y obras por la Congregación para las Causas de los Santos. Posteriormente se cerró la causa para su beatificación y canonización. En 2005 el padre Paúl Chavasse, responsable de la causa de canonización, anuncio: “al fin tenemos una cura milagrosa”. El milagro alegado ocurrió bajo la jurisdicción del arzobispado de Boston (EE.UU.), quienes tienen la responsabilidad de determinar su validez, si es confirmado.

El 3 de julio de 2009 la Santa Sede promulgó el decreto que atribuye un milagro a su intercesión. El 19 de septiembre de 2010 fue beatificado en una solemne y multitudinaria Misa presidida por el papa Benedicto XVI y la participación de Mons. Vincent Nichols (Presidente de la Conferencia Episcopal del Reino Unido).

martes, 7 de septiembre de 2010

En el nombre de Dios…

Cuando leía una noticia en un periódico a través de su página en la web, me llamo la atención lo que el comandante de las tropas estadounidenses en Afganistán, advertía sobre los riesgos que implica la quema pública de ejemplares del Corán prevista por una iglesia evangélica de Estados Unidos para el aniversario de los atentados del 11 de septiembre.

Las imágenes de la quema del Corán sin lugar a dudas serían usadas por extremistas en Afganistán y en el resto del mundo para inflamar a la opinión pública e incitar a la violencia', y esto lo llevaría a cabo una iglesia evangélica cristiana con sede en Florida que sigue una filosofía antiislámica, de quemar ejemplares del Corán.

Los musulmanes consideran al Corán la palabra de Dios y que debe tratarse con el máximo respeto. Cualquier daño intencional es sumamente ofensivo. Las imágenes de un Corán en llamas podrían ser usadas para incitar sentimientos antiestadounidense de manera similar a como lo hicieron las fotos del abuso a los prisioneros de la cárcel de Abu Graib en Irak.

Ejemplos de fanatismo se han dado en el terreno religioso con la defensa de dogmas, o la defensa de libros sagrados o de dioses, o defendiendo un punto de vista racional o irracional específico. Los religiosos afirman que, la diferencia entre religioso y fanático reside en el hecho de que el religioso ve a la religión como un medio para creer o conocer alguna deidad, mientras que el fanático ve a la religión como dios, y la trata como incuestionable.

Este generalmente contiene el deseo de ser más fanático que los demás, lo cual estos se esfuerzan por ser mas fanáticos día a día cometiendo actos que los identifiquen como tal. Este puede seguir una lógica inflexible lo cual lo lleva a defender el por que de sus creencias. En los siglos XVI y XVII el fanatismo religioso alcanzo un alto grado a causa que estos simpatizantes condenaban las ciencias debido a que esta estaba en contra de la religión, a los reyes acusados de superficiales materialistas que llevaban una vida de placeres extremistas y a los estudiosos de los astros quienes se les acusaban de servidores de Satanás.

En las religiones mas influyentes y expandidas mundial mente se han podido ver actos de fanatismo desde la decadencia del imperio romano por el cual los cristianos quemaron libros y estatuas que según estos eran inmorales dado por fulminar los avances en la literatura y arte de los griegos y los romanos. Generalmente se clasifica al fanático como una persona ignorante e ingenua, la cual mayormente este tiene el razonamiento suficiente para si mismo, para justificar y defender sus creencias mediante la agresión o juzgando a este como hereje.

Las cruzadas campañas militares comúnmente sostenidas por motivos religiosos llevadas a cabo por gran parte de la Europa latina cristiana, en particular, de los francos de Francia y el Sacro Imperio Romano. Tuvieron como objetivo específico para restablecer el control cristiano de Tierra Santa. Las cruzadas fueron sostenidas principalmente contra los musulmanes, aunque también varias campañas se hicieron contra los eslavos paganos, judíos, los cristianos ortodoxos griegos y rusos, los mongoles, los cátaros, husitas, valdenses, prusianos, y principalmente a los enemigos políticos de los papas.

Otro acontecimiento de fanatismo muy conocido fue la Inquisición que surgió hacia 1184 en el sur de Francia para combatir la herejía en la Iglesia Católica. El iniciador fue el papa Lucio, y él exigía a sus obispos que examinaran a la gente una vez al año para asegurar su ortodoxia. Al principio la Iglesia católica penalizaba la herejía con la excomunión, y desaprobaba los castigos físicos, pero con el tiempo los herejes comienzan a organizarse y se les considera enemigos del Estado.

El fanatismo siempre ha conducido a guerras y a graves desastres. Tras numerosas conflictos sociales, guerras, masacres, limpiezas étnicas e injusticias, como por ejemplo: el genocidio armenio que comenzara en 1915, o el régimen nazi en Europa y el fanatismo de Hitler que llevó a cometer atroces crímenes contra el pueblo judío.

En síntesis: podría seguir hablando y citando hechos históricos que lamentablemente toda esta gente –o algunos de ellos- lo hacia en nombre de Dios y así se cegaron la vida de millones de personas por ese pensamiento fanático. La semana pasada en los Ecos del Evangelio, yo comentaba que: “No pueden existir leyes que, en nombre de Dios, contraríen la realidad humana. Si una ley religiosa es ilógica, no significa que Dios lo sea también, sino que los seres humanos que la elaboraron en nombre divino son los ilógicos”, y a veces respaldados en leyes religiosas han cometidos actos extremistas y fanáticos. Hoy lamentablemente en la actualidad hay muchos grupos que dicen llamarse “católicos” y están escudados o escondidos bajo un nombre religioso y piadoso muy llamativo, pero ocultan sus verdaderas intenciones que no es la de evangelizar y dar a conocer el mensaje de la Buena Nueva del Evangelio, sino que se creen custodios de la fe, defensores de la doctrina y no escatiman los recursos para hacer callar fanáticamente a quien no opine como ellos… termino con ese texto del evangelio, donde nos muestra el arresto de Jesús por parte de los soldados del Sanedrín, que refleja muy bien lo que al Maestro no le gusta y que es lo que deberíamos hacer: “Jesús le dijo: "Amigo, ¡cumple tu cometido!". Entonces se abalanzaron sobre él y lo detuvieron. Uno de los que estaban con Jesús sacó su espada e hirió al servidor del Sumo Sacerdote, cortándole la oreja. Jesús le dijo: "Guarda tu espada, porque el que a hierro mata a hierro muere”. (Mateo 25, 50-52)

Alfredo Musante
Director Responsable
Programa Radial
EL ALFA Y LA OMEGA

viernes, 3 de septiembre de 2010

Mayflower

Mayflower (en el español traducido como Flor de Mayo), es el nombre del barco que transportó a los llamados Peregrinos desde Inglaterra, en el Reino Unido, hasta la costa de lo que hoy son los Estados Unidos de América en 1620. Debido a una serie de problemas en la nave, se vieron obligados a regresar en dos ocasiones para repararla, poco después de zarpar. En un tercer intento, salieron por fin de Plymouth el 6 de septiembre y consiguieron llegar el 11 de noviembre. La nave transportó a 102 personas, sin contar la tripulación. Fueron los primeros colonos, en establecerse en la costa de Massachusetts, formando la colonia de Plymouth.

Para referirse a la historia del barco, habría que hablar de las diferencias entre los puritanos y la Iglesia anglicana recién fundada por Enrique VIII en Inglaterra. Los puritanos, que fueron los que partieron de Plymouth, aplicaban una filosofía aún más radical respecto a las leyes de la Iglesia anglicana, incluso con más fervor que los calvinistas. Primero hubo un intento de retirarse hacia Ámsterdam en los Países Bajos, pero no resultó del todo bien la decisión, y decidieron regresar a Southampton. Allí se les prometió tierra (no se sabe quién ni por qué) en Nueva Inglaterra y el 16 de septiembre de 1620 partirían hacia allí. Los peregrinos buscaban crear una nueva Jerusalén y purificar así la religión anglicana de los males que la aquejaban.

Los detalles acerca de las dimensiones de la nave son desconocidos, pero se han estimado a partir del total de la carga y por la forma de los barcos mercantes de 180 ton, que en aquel período correspondían entre 90 y 110 pies de largo y cerca de 25 pies de ancho. (El tamaño de una nave, no así su peso, se medía por la carga que la nave podía llevar). El término "ton" es usado para medir la carga de una nave, la cual deriva de la palabra inglesa tun, un barril grande usado para transportar vino). La ruta inicial contemplaba realizarlo en dos barcos: el Mayflower junto con el Speedwell. El primer viaje partió desde Southampton, Inglaterra en el Reino Unido, el 5 de agosto de 1620, pero el Speedwell sufrió una vía de agua y hubo de ser reparado en Darthmouth. En un segundo intento, el barco alcanzó mar abierto en el Océano Atlántico, pero una vez más se vio forzado a retornar. Tras una cierta reorganización, el viaje definitivo se hizo sólo en el Mayflower.

Con 102 pasajeros a bordo, más el equipaje, cada familia se ubicó con sus pertenencias en un espacio bastante pequeño. En un determinado momento, la viga de soporte principal de la nave se rompió y fue reparada usando una barra de acero. El Mayflower arribó en Renwes, en el sur de la orilla de la península de Avalon en Newfoundland, donde recogieron agua y provisiones de las familias pesqueras locales antes de navegar por el Cabo Cod intentando llegar al río Hudson, pero se vieron forzados a cambiar de rumbo debido al mal tiempo. Como resultado del retraso, los peregrinos no arribaron a Nueva Inglaterra hasta entrado el invierno. Tan nimios detalles hacen historia de un viaje elemental y poco relevante comparado con los muchos otros que le precedieron entre Europa y América, a cargo de navegantes castellanos y portugueses. Antes de desembarcar, los peregrinos escribieron y firmaron el Pacto del Mayflower. Se habían equivocado en alcanzar el territorio de Virginia (nombre que se refería a Isabel I), donde tenían permiso de tierras, otorgado por alguien que se adjudicó a sí mismo tal jurisdicción. El 5 de abril de 1621 el Mayflower parte desde la colonia de Plymouth en Massachusetts, retornando al Reino Unido el 6 de mayo de 1621.