El patriarcado es un grupo de diócesis que hacen referencia a un obispo
que tiene el título de patriarca. Se definen como patriarcal tanto a las
diócesis como a las iglesias que son sede del patriarcado y del patriarca. En
la actualidad, la Iglesia Católica tiene dos clases de patriarcas: reales y
nominales. Entre los primeros se reconocen algunas sedes orientales, alrededor
de las cuales se organiza un determinado rito, y entre los segundos hay tres
patriarcados latinos. En la Iglesia de rito latino se extendió la costumbre de
llamar patriarcado a las sedes cuya fundación se debiera a uno de los apóstoles
o evangelistas. En Italia se le trata de Patriarca al arzobispo de Venecia
(sede fundada por San Marcos) y en Portugal al arzobispo de Lisboa (dignidad
otorgada en el siglo XVIII); ambos títulos son meramente nominales y sin ningún
poder jurisdiccional en sus respectivas naciones. Además, el arzobispo de la
sede de Jerusalén también recibe la dignidad de Patriarca. Los Patriarcas
orientales son elegidos por los obispos de sus respectivos ritos, con la
aprobación del Papa, quien les entrega el palio simbólico de su dignidad. Es de
destacar que el papa Benedicto XVI
no adoptó el título de «Patriarca de
Occidente», como prueba de la voluntad de acercamiento a la Iglesia
ortodoxa. Sobre ellos, en el decreto ORIENTALIUM
ECCLESIARUM de 1964, se dice:
“Con
el nombre de Patriarca oriental se designa el Obispo a quien compete la
jurisdicción sobre todos los Obispos, sin exceptuar los Metropolitanos, sobre
el clero y el pueblo del propio territorio o rito, de acuerdo con las normas
del derecho y sin perjuicio del primado del Romano Pontífice. Dondequiera que
se constituya un Jerarca de rito determinado, fuera de los límites del
territorio patriarcal, permanece agregado a la Jerarquía del Patriarcado del
mismo rito, según las normas del derecho. Aunque cronológicamente unos sean
posteriores a otros, los Patriarcas de las Iglesias orientales son todos
iguales en la dignidad patriarcal, aunque se guarde entre ellos la precedencia
de honor legítimamente establecida. Según la antiquísima tradición de la
Iglesia, los Patriarcas de las Iglesias orientales han de ser honrados de una
manera especial, puesto que cada uno preside su patriarcado como padre y cabeza
del mismo. Por eso, este santo Sínodo establece que sus derechos y privilegios
sean restaurados según las tradiciones antiguas de cada Iglesia y los decretos
de los concilios ecuménicos. Estos derechos y privilegios son los mismos que
había en el tiempo de la unión entre Oriente y Occidente, aunque haya que
adaptarlos de alguna manera a las condiciones actuales. Los Patriarcas con sus
sínodos constituyen la última apelación para cualquier clase de asuntos de su
patriarcado, sin excluir el derecho de erigir nuevas diócesis y de nombrar
Obispos de su rito dentro de los límites de su territorio patriarcal, salvo el
derecho inalienable del Romano Pontífice de intervenir en cada uno de los
casos. Lo que se dice de los Patriarcas también vale, según las normas del
derecho, para los Arzobispos mayores que presiden una Iglesia particular o
rito. Siendo la institución patriarcal una forma tradicional del gobierno entre
las Iglesias orientales, desea el Concilio santo y ecuménico que donde haga
falta se erijan nuevos patriarcados, cuya constitución se reserva al Concilio
ecuménico o al Romano Pontífice”
Las iglesias ortodoxas y
orientales tienen un patriarca al frente de cada Iglesia autocéfala. Los
patriarcados de la iglesia ortodoxa son:
Patriarcado de Constantinopla
Patriarcado de Alejandría
Patriarcado de Antioquía
Patriarcado de Jerusalén
Patriarcado de Moscú
Patriarcado de Georgia
Patriarcado de los Serbios
Patriarcado de Rumanía
Patriarcado de Bulgaria
Patriarcados ortodoxos que no
están en comunión con Constantinopla
Patriarcado de Moscú de la
antigua iglesia ortodoxa rusa
Patriarcado de Kiev de la
Iglesia ortodoxa ucraniana
Patriarcado de Kiev de la
Iglesia ortodoxa autocéfala ucraniana
En el ámbito de la iglesia
católica occidental existen los siguientes patriarcados de rito romano:
Patriarcado de Venecia
Patriarcado de Lisboa
Patriarcado de las Indias
Occidentales (sede vacante desde 1963)
Patriarcado de las Indias
Orientales (posee la archidiócesis de Goa e Damão)
Patriarcado Latino de Jerusalen
En el ámbito de la iglesia
católica oriental existen los siguientes patriarcados (de diversos ritos
orientales):
Patriarcado Copto de
Alejandría
Patriarcado Melquita de
Antiochia (con sede en Damasco, Siria)
Patriarcado Maronita de
Antioquía (con sede en Bkerké, en El Líbano)
Patriarcado Sirio de Antioquia
(con sede en Beirut, en El Líbano)
Patriarcado Armenio de Cilicia
(con sede en Beirut, en El Líbano)
Patriarcado Caldeo de
Babilonia
También hubo un Patriarcado de
Cartagena (siglo VII), Patriarcado de Grado (suprimido en 1451, cuando el
título de patriarca se transfirió a la sede de Venecia), el Patriarcado de
Aquilea (en 1751) y, más recientemente, los patriarcados Latino de Alejandría,
Latino de Constantinopla y Latino de Antioquia, los tres en 1964 del papa Pablo
VI por regiones legadas al ecumenismo. Durante un determinado período de tiempo
(en la Edad Media) hubo el título de patriarca del arzobispado de Bourges.
Desde 2006 el papa Benedicto XVI ha renunciado al título de Patriarca de
Occidente, por la imprecisión que ha adquirido el concepto de Occidente y por
su contraposición a los Patriarcas de Oriente, manteniendo Patriarcado de la
Iglesia Latina.