De
acuerdo con la tradición judía, ROSH
HASHANA es el día de la creación del primer ser humano sobre la faz de la
Tierra y es a partir de esta celebración cuando se cuentan los años. Al
respecto, los sabios explican que desde su creación, se le confirió al hombre
el don del libre albedrío, la responsabilidad por su propio desarrollo y por
plasmar el orden moral en el mundo. La
celebración comienza al anochecer de la víspera. Uno de los momentos más
importantes de ROSH HASHANA está dado
por el toque del SHOFAR, un antiguo
instrumento fabricado con el cuerno de carnero. El término hebreo “shofar” comparte su raíz con el
verbo “leshaber”, que
significa “mejorar”. Se trata
de un sonido cuyo fin es estremecer, despertar la conciencia y llamar a revisar
las acciones personales, con el objetivo de mejorar. La tradición sostiene que
sólo a partir de ser mejores personas –tras haber hecho el TIKÚN ATZMÍ, la “reparación
personal”, podemos hacer “tikún
OLAM”, “la reparación del
mundo”
ROSH HASHANA (Comienzo del Año), junto con YOM KIPPUR (Día del Perdón), forman en la tradición judía una unidad llamada YAMIM NORAIM (Días Terribles), por ser el momento en que Dios juzga al mundo y
decreta lo que sucederá en el transcurso del nuevo año. ROSH HASHANA se celebra el 1º y 2º día de Tishrei (7º mes del calendario hebreo). A diferencia de otros
calendarios, el hebreo es lunisolar, es decir, que se basa tanto en el ciclo de
la Tierra alrededor del Sol (año), como en el de la Luna al rodear a la Tierra
(mes). Este calendario se basa en un complejo algoritmo que permite predecir
las fechas exactas de luna nueva, así como las distintas estaciones del año,
basándose en cálculos matemáticos y astronómicos.