“Metrópolis” es una película muda alemana estrenada en 1927, dirigida por Fritz Lang y producida por la influyente productora UFA. Este filme es uno de los máximos exponentes del cine expresionista alemán, un movimiento que, tras la Primera Guerra Mundial, buscaba retratar las emociones humanas y las profundas crisis sociales a través de imágenes y escenarios deformados y estilizados. Con una estética visual impactante y un contenido profundamente reflexivo, “Metrópolis” no solo cambió el curso del cine, sino que dejó una huella imborrable en la cultura popular y en el género de la ciencia ficción.
El guion fue coescrito por Thea von Harbou, también autora de la novela en la que se basa la película. Su colaboración con Lang, quien en ese momento era su esposo, fue clave para dar forma a una historia que explora las tensiones entre el poder de las clases dominantes y las luchas de las clases trabajadoras. Ambientada en una ciudad futurista, “Metrópolis” presenta un mundo dividido entre una élite que vive en lujosos rascacielos y los trabajadores que, literalmente, sostienen esta civilización desde las profundidades subterráneas. Esta división entre ricos y pobres, y el temor a las crecientes tensiones sociales, reflejaba muchas de las preocupaciones de la Alemania de entreguerras.
Uno de los personajes más icónicos del filme es el androide Maria, cuyo papel como símbolo de la opresión y la rebelión fue revolucionario para la época. El diseño del robot, con su estética modernista y mecánica, influenció desde películas de ciencia ficción posteriores hasta la cultura pop en general. Además, las complejas temáticas abordadas, como la lucha de clases, la alienación del trabajador y el peligro de una sociedad deshumanizada por la tecnología, convirtieron a “Metrópolis” en una película visionaria que sigue siendo relevante en el siglo XXI.
El impacto del film no se limita al cine de ciencia ficción. En 2001, fue reconocida como parte del programa Memoria del Mundo de la UNESCO, siendo el primer filme en recibir tal distinción, destacando la capacidad de la película para representar toda la sociedad y su profunda reflexión sobre la humanidad, la tecnología y la justicia social. Este reconocimiento no solo subraya la importancia histórica de “Metrópolis”, sino también su influencia perdurable en la cultura global.
Equipo de Redacción
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